Cuando me baja el querer investigar el origen de las cosas, me baja.
El sonido al final de los comerciales de Duracell tenía que venir de algo. Y ese algo sea, posiblemente, este réclame de 1968 que se emitió en USA por radio. El sonido se repite una y otra vez y se supone que es el de un reloj espacial que debe funcionar por años sin intervención humana. No sé hasta qué punto sea real y dónde comience la fantasía, en todo caso. Y la única batería capaz de lograr eso es Duracell, una nueva batería creada por Mallory e introducida al mercado gringo en 1964. Mallory era una empresa que venía comercializando baterías desde 1924, pero que la pegó tanto con Duracell, que años después abandonó la marca Mallory en favor de Duracell.
Es extraño escuchar el sonido de Duracell una y otra vez. Talvez un tanto creepy.
[vía]
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