Y llegó la democracia. La alegrÃa, esa todavÃa no, pero al menos llegó un nuevo aire a la tele. Y con ello, Los Venegas.
Por más de una década creÃmos que Los Venegas, sitcom insigne de las tardes en el canal vetado, era una entelequia incombustible. Si hasta la "Martita", acérrima fan de la serie, pidió que no la sacaran del aire. Y anda a llevarle la contra a la primera dama. El asunto es que los personajes crecieron, se casaron, armaron su cuento, y hubo un momento en que nadie atinó a hacer un párele. ¿De dónde sacas creatividad para producir un capÃtulo diario (lunes a viernes) por más de una década? Recordado (por su ausencia) el famoso "Memito" o "Memo", el hijo menor de la familia, que cuando salió de la enseñanza media no se le vio más. Es que entró a estudiar IngenierÃa. Recuerdo que lo nombraban a ratos en los pasquines de IngenierÃa de la UC. Me llevaba algunas generaciones de diferencia. Nunca me lo topé en un curso eso sÃ. En los últimos años por lo único que valÃa la pena ver Los Venegas era por el "Compadre Moncho", otro incombustible, personificado por el actor Adriano Castillo, a quién de paso se le podÃa ver cuando habÃa reunión de apoderados en el Instituto Nacional, más o menos en el tiempo que estudié ahÃ, y otras veces en el Metro de la Universidad de Chile. Mi vieja un dÃa lo vio en el Metro. Lo encontró "sobrado".
Durante los primeros años, Los Venegas la llevaron en mala. Tanto asà que alcanzó el vuelito para hacer comerciales como éste de Banda Azul. Hoy, sin publicidad, Banda Azul aún existe, pero ya no es como antes, y no me refiero a la calidad. Aunque quién sabe...
Los primeros años, esos sà eran buenos tiempos. El cuento es cuándo decir basta.
0 comentan