Hoy en la radio escuché a una amiga de mi vieja. Una señora amorosa y querendona a más no poder. Ella un dÃa llegó a mi casa con un folleto de admisión del Instituto Nacional cuando mi vieja apenas pensaba en cambiarme de colegio. Su hijo ya estaba estudiando allá. Luego me cambié de casa, entré a la universidad y nunca supe más de ella y de su familia. Sólo supe que su hijo, Alejandro, del cual me hice amigo a la larga, entró a estudiar IngenierÃa Eléctrica a la USACH.
Es un amor ella. Aún está viva. Cuando la conocimos yo y mi vieja en esos tiempos, ya era viejita. Vaya sorpresa.
Para terminar, dos preguntas:
1.- ¿Por qué tuvo que ser justo hoy, dÃa en que murió mi vieja?
2.- ¿Quién me manda a escuchar médicos naturistas en AM?
Y a propósito de ladrones chilenos... ¿se acuerda de este pastelito?