Estamos ante una pieza inmortal de la publicidad en Chile. Uno de los tantos personajes que nos mostró por la tele el Hogar de Cristo, pero que, sin duda, es el que aún mejor se recuerda: el “Flauta”. Un niño, como tantos de dicha fundación, que se hizo famoso por tocar la flauta dulce a temprana edad de forma autodidacta.
Sin embargo, hay un hecho en este spot que podrÃa
pasar con tintes de polÃticamente incorrecto, y es que el “Flauta” en
este spot sólo hace como que toca, pero no está tocando en directo.
Basta notar cómo usa los dedos, los que no se corresponden con las notas
que está tocando. Y además el soplido no tiene el timing exacto con el
video. O puede que haya grabado el audio aparte y hecho una suerte de
playback con la idea de vencer los nervios de estar siendo grabado. Pero
entonces, si supuestamente se sabe el “Himno de la AlegrÃa”, por qué
entonces no usó los dedos correctamente al grabar. Jamás lo sabremos.
Como sea, un mensaje que pretenda recolectar ayuda, más aún en tiempos
de televisión y de videotape, a veces no tiene por qué ser perfecto. A
esto de verdad le sobra alma. Hay que ser muy duro de corazón para no
conmoverse. El “Flauta” es inmortal. De hecho se recuerda mejor que otro
notable, el de las “miguitas de ternura”. En resumen, y aunque
imperfecto, el spot es una joya.