SÃ. Los vilipendiados aunque quitados de bulla productos Doña Clara nacieron, publicitariamente en la Teletón del '82. Y con un musical. "Acláreme quién es Doña Clara" rezaba una parte del spot. No pocas marcas han aprovechado la Teletón para lanzarse, más aún antiguamente en que no habÃan canales de cable y la Teletón era casi cadena nacional. La oferta inicial eran mermeladas, arvejas y salsa de tomate. A la usanza antigua, o sea, en lata. Eran tiempos dificiles y para la dueña de casa, que le dijeran por la tele que un producto "rinde más" y es "económico" y que más encima era sabroso y delicioso, era casi una bendición del cielo (y si no, vaya a ver el éxito que tuvo el té La Rendidora... lanzado por allá por esa misma época... creo). Sin embargo, hay que decirlo, la calidad siempre fue como final de cumbia, o sea "ahà no más". Las arvejas salvaban (aunque nunca me gustaron de tarro, tenÃan un sabor raro). Y de las mermeladas y salsas de tomate, le hacÃan honor a su nombre: aguachentas, "claritas", como ninguna.
Y el comercial, al final de tanto claro, aclaro, clara y demases, parecÃa casi trabalengua. Y "Don Francis", de hacer esto el '82, terminarÃa siendo 3 décadas después rostro de una compañÃa que, oh, se llama "Claro". Pero ésta no vende mermeladas ni salsa de tomate. Tal vez venda humo como todas las "telcos", pero no salsa de tomate.
"¿Le queda claro? Porque si no, de nuevo se lo aclaro..." ¡No, por favor!
Y el comercial, al final de tanto claro, aclaro, clara y demases, parecÃa casi trabalengua. Y "Don Francis", de hacer esto el '82, terminarÃa siendo 3 décadas después rostro de una compañÃa que, oh, se llama "Claro". Pero ésta no vende mermeladas ni salsa de tomate. Tal vez venda humo como todas las "telcos", pero no salsa de tomate.
"¿Le queda claro? Porque si no, de nuevo se lo aclaro..." ¡No, por favor!