Ayer lunes comenzaron los programas satélites del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar. Sin entrar a discutir si algo de queda que lo haga merecedor a llamarse "de la Canción", ayer lunes por la mañana quedé sorprendido de que todo el ajetreo televisivo de estos dÃas festivaleros se haya ido del lugar que por años fue el epicentro pre-festivalero: el mÃtico Hotel O'Higgins.
En los últimos años ya era frecuente que muchos artistas internacionales -por no decir casi todos- prefirieran hospedarse en otros hoteles alternativos de la llamada siúticamente "ciudad jardÃn". Se decÃa que las habitaciones no tenÃan aire acondicionado, que el ascensor a veces fallaba, que los baños dejaban bastante que desear y que en general todo en el hotel era bastante antiguo. Hasta animalitos de dudosa reputación se decÃa que andaban por sus pasillos. Y justo hoy veo confirmados esos dichos en TripAdvisor, un sitio gringo de reviews de hoteles de todo el mundo en donde el viejo y querido Hotel O'Higgins está rankeado #23 de entre 28 hoteles en Viña del Mar. Sólo le siguen hoteles no rankeados. SÃ, el peor rankeado hotel de la ciudad, pese a toda su tradición y a todo el dinero que recaudó por concepto de Festival de Viña todos estos años.
La noticia más reciente de parte del mismo hotel en su sitio web relativa a infraestructura está desde hace casi dos años y afirma que el hotel se encontraba en remodelación. Bastante tarde reaccionaron: actualmente el canal organizador (Canal 13) se trasladó con todo al nuevo hotel Sheraton Miramar, rankeado #2 en el mismo sitio referido anteriormente, sólo superado por el Hotel del Mar el que cada dÃa es más preferido por artistas de esos que cobran bien caro. AsÃ, se termina de romper una tradición de décadas con el otrora hotel festivalero por excelencia.
Seguramente se sintieron protegidos por la tradición. Pero cuando se agarra mala fama y no se invierte a tiempo para revertirlo, cosas ocurren.