Este trencito está a la entrada del museo y tiene una escalera por la cual se puede bajar para ver el tren por debajo.
Este otro tren está en otro lugar del museo y es el único al cual se puede entrar para verlo por dentro. Lo que está delante es una laguna en la que hay algunos peces... eso sÃ, no alcanzamos a ver peces mutantes por más que esperamos y nos esforzamos :)
El mismo tren, pero por dentro.
La Gentzane llevó a su chicuelo travieso y con esta escena comenzamos a decirle que era peligroso ponerse en ese lugar y mira lo que le pasó al niñito que pasó por ahà en su bicicleta... Fuimos crueles... Sorry, nunca más ;)
Faltaron algunas fotos no publicables que supuestamente no salieron porque, debido a mi inexperiencia en camaras digitales, salieron borrosas (eso fue lo que ella me dijo...), y otras como el tren "300 los niños y 500 los adultos, recorremos toooooooda la quinta", al ritmo de la Karen Paola (y la Gen que casi se aprende todos los temas), una llama de un fotógrafo que encotramos amarrada a un árbol (flor de fotógrafo, dejó a la pobre abandonada a su suerte) y por cierto, las de este traviesÃn chiquillo de la Gen que nos tuvo caminando toda la tarde.
Eso. Bien igual... "te dice ven, ven, ven, hace bang, bang, bang, luego bum, bum, bum, estalla el co-ra-zón...", jajajajajajaja...
Y naturalmente se dicen muchas cosas. Que este señor Graham está relacionado con Bush y su guerra en Irak, que hasta cuando los canutos se van a estar apropiando de los medios y yada, yada, yada.
Si te ha pasado esto, estoy muy feliz de avisarte que estás a medio camino entre una persona común y un fan, o sea, el grupo no es indiferente para tà pero tampoco te devoras sus discos.
El otro gran desencanto es el de las radios red-satelital. En Viña se quejan de que "ya no dan ganas de prender la radio, porque está casi todo satelizado desde Santiago". En efecto, recientemente fue la venta de toda la red de Radio Carolina, que era de las pocas que tenÃa programación autónoma en cada región en que estaba. Los nuevos dueños, el consorcio periodÃstico Copesa, por economÃas de escala descartarÃan mantener esta modalidad de operación, por lo que el fin de la programación regional serÃa inminente.