Hace un tiempo lo hueviamos, pero hay que ser justo: pocas cosas dan tanto por tan poco como un brick game (“Tetris”, para los amigos). TodavÃa los venden nuevos por Internet, pero no seamos tan fomes. Se puede hacer más interesante y ese interesante viene de que este brick game es el que estaba en casa y sobrevivió guardado, de caja en caja, por unos pocos más de treinta años. Un dÃa dejó de funcionar bien, no se le puso pila nunca más, se le pegaron algunos botones y quedó ahà tirado.
HabÃa que darle un poco de amor. Asà que limpié la caja con jabón suave y luego con alcohol común para quitar algunas manchas de bolÃgrafo. Extrañamente eso se deshizo de mucho del amarilleo del plástico. Lo abrà y limpié también con ese mismo alcohol los contactos de los botones que no funcionaban (sólo tenÃan mugre y un poco de humedad). Luego raspé y apreté un poco los terminales metálicos del compartimento de las pilas, que estaban un poco sulfatados, para que hicieran buen contacto.
Un error de diseño (o recorte de costos) fue que no tuviera resortes en el compartimento de las pilas, sino que éstas vayan insertadas a presión, porque los contactos se deformaban y las pilas quedaban sueltas. Esto provocaba muchos de los glitches en pantalla. Otro tanto de esos glitches ocurrÃa con pilas medianamente gastadas cada vez que emitÃa sonido, porque cuando el parlantito sonaba, provocaba un bajón de voltaje que rompÃa el juego y se congelaba, haciendo imposible seguir. Pero con pilas frescas, no pasa nada.
Al final le puse tres pilas AA nuevas y listo. Quedó al 100. Una maravilla. Sin segmentos malos en pantalla, sin pegarse con nada, listo para jugar.
Al contrario del recuerdo popular de los “999999 juegos en 1”, éste fue de los primeros modelos y sólo tiene 5 juegos (el Tetris estándar, otro Tetris con piezas más complicadas, más otros 3 juegos de bloques).
Antes que salte alguien a la micro por atrás, NO SE VENDE. TodavÃa recuerdo, en la sucursal de la F, la avalancha de compradoras que creyeron que tenÃa una enceradora a la venta porque subà un aviso de época sacado de una revista. Algún dÃa habrá que desclasificar esa historia. O mejor no.