Ya, 60 millones no es mucha plata, ¿no? El cuento es que el querido ce-efe-té Simon Bolivar, el mismo que nos mostraba una señal en el cielo, nos iba a buscar a la playa y nos ofrecía la posibilidad de conocer lindas niñas para pedirles pololeo a la semana de empezar las clases, es sorprendido por una petición de quiebra. Tiró 2 cheques a fecha que resultaron terminar sin fondos. Las redes sociales festinan (lo cual resultó hasta en una desactivación de comentarios e inserción de uno de sus comerciales por parte de la agencia) y cambian la letra de su insigne jingle:
"Lo mejor ya se está haciendo,
Simón Bolivar está creciendo.
Ven a ganar, ven a triunfar,
una carrera te espera (...aaaaaaaa)"
Así han aparecido variaciones como "Lo mejor ya se está haciendo / Simón Bolivar se fue a la chucha..." Pero, volviendo al tema, pese a prometer el éxito a sus estudiantes, y con todo respeto, aún siento que los centros de formación técnica (e incluso algunas universidades privadas) son manantiales de mano de obra barata, que lo único que te garantizan es no trabajar haciendo el aseo. Si es que. El gobierno, de cuando en cuando, se lanza las frases al viento diciendo que "lo que necesita Chile son técnicos". Sóplame este... ojo.
Sigo en lo de los 60 millones. Para una institución como ésta no es mucha plata ¿no? Pedir la incautación de todos sus bienes no será mucho? Me huele a otra cosa.
0 comentan